Mucho tiene que cambiar la visión del PSOE para que se pueda llegar a un Pacto serio en Educación. No es que muestre mi resistencia al Pacto, sino que expongo mis reticencias hacia lo que significa el modelo educativo socialista.
En medio de este runrún que se está transmitiendo sobre un posible Pacto está calando, de manera sibilina, una idea que debemos rechazar: el fracaso de la educación en España es culpa, en gran parte, de las sucesivas leyes – casi una por legislatura – que hemos vivido en nuestra etapa democrática. Y en estas leyes se incluye la LOCE del PP.
Conviene recordar, y escribir en letras gruesas que LA LEY EDUCATIVA DEL PP NO TUVO TIEMPO NI SIQUIERA DE PONERSE EN MARCHA PUES FUE DEROGADA DE UN PLUMAZO CUANDO ZAPATERO LLEGÓ AL GOBIERNO. Por eso, si tenemos un problema en la educación, un problema de fracaso escolar, de aprendizaje, de idiomas, de esfuerzo, de calidad, de apoyo al profesorado etc y ese problema tiene su origen en la legislación, el culpable no es otro que el modelo socialista y la visión socialista de la educación que tuvo su cenit en la LOGSE y su Ave Fénix con la nueva LOE que permitía –entre otras lindezas- pasar de curso suspendiendo 4 asignaturas.
Ahora el Ministro quiere un Pacto y , desde luego, yo creo que es necesario un pacto que mantenga una legislación en el tiempo durante algunas generaciones para consolidar nuestra recuperación, pero es, de momento un Pacto interesado pues no debemos olvidar que la LOE (Ley Orgánica de Educación) se juega su estabilidad ahora, apenas tres años después de nacer, y el Gobierno confía en llegar a un pacto político con el PP para mantener en vigor la norma justo cuando arranca el curso en el que alcanza el 100% de su desarrollo (algo que no se le permitió a la legislación del PP).
Por lo tanto, bienvenido el Pacto, y bienvenidas las palabras de Gabilondo sobre esfuerzo, calidad, apoyo al profesor etc… Lamentablemente son las mismas palabras que rechazaban en la LOCE o que no aceptaron en la tramitación de la LOE, o son principios de los que se ríen, como cuando desde el Gobierno de Madrid se impulsa el apoyo a la autoridad del profesorado.
Así que si, el Gobierno del PSOE quiere llegar a un acuerdo, lo primero que debe hacer es reconocer su error de estos años, y posteriormente, demostrar con hechos su apuesta por el esfuerzo y la calidad en la enseñanza y no por el dogmatismo y el sectarismo.
Si lo hace, si acepta que sin autoridad del profesorado, sin esfuerzo, sin calidad, sin rigor y sin excelencia, es imposible crear un modelo educativo competitivo, podría ser el principio de un acuerdo. Pero ¿reconocerán su error y se abrirán a una reforma que garantice el futuro de nuestros hijos y no su adoctrinamiento?